Tarta de mostaza Maille a la Miel y fresas maceradas
Instrucciones para las fresas:
En un tazón grande, mezclamos las fresas, la mostaza Maille a la Miel y la miel. Dejamos que las fresas se asienten de 15 a 20 minutos para que suelten algo de su jugo, luego las cubrimos y las guardamos en el refrigerador hasta que estén listas para servir. Esto se puede realizar con 24 horas de anticipación.
Instrucciones para el pastelito:
Precalentamos el horno a 220 grados. Cubrimos una bandeja para hornear con papel pergamino y reservamos.
En un tazón grande, mezclamos la harina, el polvo de hornear, la sal y 6 cucharadas de azúcar y mantequilla. Usamos las manos para incorporar la mantequilla en los ingredientes secos hasta que la mezcla se asemeje a migas gruesas.
Alternativamente, podemos hacer este paso en un procesador de alimentos, pulsando la mezcla de 15 a 20 veces, antes de transferirla a un tazón grande.
Agregamos gradualmente la leche, solo hasta que esté combinada, asegurándose de no trabajar demasiado la masa (si no la masa estará bastante pegajosa).
Extendemos la masa en un rectángulo sobre la bandeja para hornear preparada. Untamos con crema espesa y espolvoreamos con la 1/2 cucharada de azúcar restante.
Horneamos durante 12-15 minutos, o hasta que los bordes comiencen a ponerse crujientes y la parte superior se ponga dorada. Retiramos y dejamos enfriar. Cortamos en cuadrados justo antes de ensamblar.
Instrucciones para la crema:
Con una batidora de mano o una batidora de pie con el accesorio para batir, batimos la crema a velocidad media hasta que se formen picos suaves, aproximadamente 2 minutos. Agregamos el azúcar (o miel) y la vainilla, y continuamos batiendo hasta que se combinen, asegurándonos de no mezclar demasiado la crema. Mantenemos tapado y frío hasta que esté listo para servir. Esto se puede hacer con 24 horas de anticipación.
Instrucciones para servir:
Colocamos un trozo de tarta en un plato. Cubra con una generosa porción de fresas y una gran cucharada de crema.
¡Disfrutar!